¡Finnish boda!

Ni de lejos me imaginaría que esta experiencia iba a tomar este camino. 

Cuando dices que te vas a vivir a una granja en Finlandia, lo primero que le viene a muchos a la cabeza, "madre mía, este acaba emparejao con una oveja. Allí, a pasar penurias, aislado del mundo." Es comprensible este pensamiento, y desatinado, más que la meada de un borracho. 

El viernes se presenta como un día más. En principio. Un poco de trabajo matinal, echamos una mano cogiendo algunas verduras, regando el invernadero (de donde sacan tomates que venden a 12 lereles el kilo) y preparando patatas para el cole donde trabajaré. 

Un poco de descanso porque parece que a la noche toca ir a Tampere a ver qué se cuece. Hay concierto de Wiz Khalifa, obviamente no entraremos, no tenemos 120 € para ir a ver al paio este. Antes de salir echo una compra semanal en el Lidl. La gran mayoría de la pasta se evapora en rubias y fruta. ¡Hay que estar sano!

El concierto tampoco supone nada del otro mundo, el ambiente es bueno y nosotros hacemos de niñeros con Ian. Lo más excitante es que conduzco una furgoneta de 9 plazas, y muy pro, no es por echarme flores. De camino, mascando chicle se me salta un empaste, cosas que pasan. Si no paga impuestos, pa fuera. Así que dentro de poco os contaré como son los dentistas fineses. 

A lo tonto consigo dormir 5 horitas, nada mal. Por la mañana mercadillo. Muy buen rollito, como siempre en el mercadillo. Luca hace algunos primeros planos de la gente en blanco y negro. La verdad es que me molan mucho. Los sábados es un gusto comer, todos los nenes revoloteando por la casa. 

El viernes, en la reunión para organizar la semana manifesté mi firme intención de ir a la boda como voluntario, com pa no. No me libro del trabajo de camarero ni en Finlandia. 

Creo que la palabra impensable englobaría bastante bien lo que fue la boda. Ni de lejos me imaginaba que acabaría a las 2 de la mañana en la sauna frente al lago pegándonos baños en el lago. Pero no adelantemos acontecimientos. Luca y yo nos plantamos allí a las 14:30 para empezar a ayudar con los preparativos de la cena. Sí de la p cena a las 16. Emplatamos, sacamos comida, bebida, me hincho a abrir botellas de vino, como en La Latería, como en casa. Esta gente son muy previsores, pero mucho. Lo que se traduce en que nos hinchamos a comer y a beber vinito. Demasiada comida, mañana a dieta. Pero no paro de comer, facepalm. 

Café time, este país es el mayor consumidor de café. Así que preparamos café para llenar una piscina municipal. Postrecito, claro está. No vaya a ser que esté envenenado y nos carguemos a alguno. De ahí a lo que en España sería una barra libre de las buenas, pues ellos pusieron birra y vino como nosotros la ginebra, el ron, y demás soldados de bodas. Normal, a 20€ la ginebra más económica, y con lo que le gusta pimplar a esta gente, pues sería la ruin ruina. Los voluntarios, Maelle, Luca, Jaume y yo nos podemos unir a la fiesta. Finalmente acabamos siendo la fiesta. Nivel de la fiesta muy top, poco se habla de lo bien que lo hemos pasado. Nos hacemos con los mandos del dj y lo partimos, cerrando con un Flying free y una macarena, que a este gente le encanta la macarena. Cuando digo lo partimos me refiero a nosotros 4 solos y otros 3 más que se unieron, nos sobra con nosotros. 

Ari cual pro

Así que para rematar la noche, botella de vino blanco fresquita y pa la sauna. Ya va siendo hora de volver, no sin antes hacer una parada en boxes en la cocina. Pizza. Encontramos pizza, eso lo tuvo que poner ahí Dios, por lo menos. La devoramos y vuelta a casa, a patita, que no es nada, un kilometro, 30 minutos... 

Esta mañana me he despertado dando un salto mortal. Bueno tampoco, me he despertado, pues como siempre deseando hacer algo, que me quema la cama. Un baño en el laguito, con su agua fría y su brisa mañanera me deja como nuevo. Un poquito de hacer el vago por doquier, un poco de sol en el columpio y a comer. A dieta, por supuesto, que ayer comí para toda la semana. Qué feliz, encima todo de calité, de boda, vamos. Toca recoger la habitación, que aún no tengo el armario para la ropa, mañana me lo ponen, y eso de tener todo en las maletas es una locura. Parece el Primark en rebajas. Salgo a correr con Silvestre y Jaume. Me quedo un ratito echando unas cuantas series, estirar ducha, cena, skype con la familia y blog. 

Buenas noches, que muero de sueño. Mañana a Tampere en bici, a ver el cole.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

By far, this is not what I expected before coming here. 

When I said that I was moving out to a Finnish farm, the first thing that comes to people mind is, "my god, he is going to go mad. He is going to be alone, isolated from the world. " I can understand that people think in this way, but they are wrong, believe me. 

Friday starts as a common day. Apparently. Some morning work, we help picking up some veggies, watering the greenhouse (from where they get tomatoes and they sell them 12€/k, so expensive compared to Spain, but this is not Spain), finally we prepare some potatoes for the school where I will work. 

Resting a little bit is a wise idea. It seems that tonight we will go to Tampere to be around Wiz Khlifa's concert. Obviously where are not going in, we lack 120€ to see this man. Before going I go to the grocery. Almost all my money flies buying beer and fruit. I have to stay fit!

The concert is not something really special, the surroundings are good, and we are babysitting Ian. The most exciting thing was to drive a 9 seats van. I enjoyed it, and it is not about loving myself, but I was quite pro. On the way a toothfiller went out of its place. So it is time to go the Finnish dentist. 

Incredibly I get to sleep 5 hours, not bad. Morning market, lovely. Good vibes, as always. Luca take some monocrome portraits. I like them quite a lot. It is a pleasure to eat on saturdays here, all the kids cheer up the house. 

The previous day I say that I want to be at the wedding helping as a volunteer. It's good. I don't get rid of being a waiter, not even in Finland. Unthinkable is the perfect word to describe the wedding. I never spected ending in the sauna in front of the lake at 2am having sauna and swimming in the lake. Yet I don't want to foresee any event. Luca and I are ready at 14:20 to start pour helping task. We plate, serve wine, food, I open many bottles of wine, as if I were back home at La Latería (where I used to work). These people are careful people, and there is a good ammount of leftovers. What else can we do but eating and drinking? Too much,it is too much. Tomorrow: diet.

Coffee time, there is no other country that consumes more coffee. So you can guess, we prepare coffee to fill a swimmingpool. Then some cake, of course. Now it is our time, we join the pary. There is wine and beer for everyone. In Spain we have gin, rum and those kind of drinks. Here the cheapest gin is 20€, so you can imagine. It is impossible to have free and unlimited drinks for everyone. Maelle, Luca, Jaume and I cheer up at the party, and at the end we become the party. We are dancng alone, but this is so funny. We become kind of djs and play some Spanish music, of course Despacito, they love it. Then some Flying Free and Macarena to close the party.

Now it is time to go to the sauna, by the lake. Amazing. Sauna, lake, sauna lake and again. But it is time to go back, not without stopping in the kitchen to take some food, we starve. Food please. What do we find? Pizza, I think God lay it there, no one else could do it. We ate it and spend 30 minutes to do the way back home, 1 km.

This morning I just woke up and went to the lake to refresh my mind. The cold water and the morning breeze wake me up. I feel lazy, don't do too much, some sunbathe and eating time. As you can imagine, I am on diet, so not to many. I watch a Tv series, tidy up my room, tomorrow I will finally have a wardrobe. I go running with Silver and Jaume, make some intervals, shower, dinner, skype with my parents and bed.